La respuesta por lo general es sí.El cartel de venta es una poderosa herramienta de promoción que no debe menospreciarse. La excepción a este principio la constituyen propiedades de muy alto valor o aquellas que requieran funcionar mientras se realiza el proceso (como locales institucionales o comerciales, por ejemplo).
En todos los demás casos, es una inteligente decisión que facilita el proceso. Aquí algunas ventajas:
- Permite que se enteren personas que no son compradores pero que pueden conocer a un posible interesado… y avisarle, acortando el tiempo de venta.
- Ayuda a la promoción, de manera complementaria a la difusión en redes y otras estrategias de marketing inmobiliario, facilitando el éxito.
- Ayuda a que algunos propietarios renuentes o tristes ante la venta, puedan interiorizar el proceso y así empezar a realizar las acciones que les correspondan (embalar sus pertenencias, realizar sus trámites, desocupar la vivienda, etc.), una vez quedó evidente, que su casa será vendida.
- Es útil para aquellas personas que se rehúsan a integrarse a la tecnología y prefieren los métodos convencionales de búsqueda de casa. Aunque no lo parezca, muchas personas aún realizan su búsqueda recorriendo el barrio elegido.
- No genera complicaciones a los habitantes del inmueble si se toma la precaución de anotar en el cartel el nombre del corredor y su teléfono, ya que será a esa persona a la que llamarán.
¿SÓLO SE REQUIERE PONER EL CARTEL?
De ninguna manera. Por sí solo, un cartel de “SE VENDE” no logrará el objetivo (salvo un muy eventual golpe de suerte) ya que en un mercado tan grande y competitivo se requieren muchas estrategias de comunicación para encontrar el comprador de la propiedad que ofrecemos. Entre otros puntos, hay que tener en cuenta que:
- Es vital para el propietario no realizar la venta directamente, pues muy rara vez está preparado para ello y generalmente no tendrá el tiempo ni los recursos necesarios. Lo correcto es encargar la tarea a expertos en el ramo. En el caso de RE/MAX los asesores inmobiliarios están capacitados para ofrecer la orientación que el cliente requiere, para acompañarlo en el proceso, y para realizar las estrategias comerciales adecuadas. Con la presencia de un profesional, el comprador se sentirá más seguro y podrá definir su interés confiado de que todo saldrá como es debido.
- También es importante poner el inmueble en condiciones de atraer compradores, tanto en lo exterior como en lo interior. De no hacerlo, se podrán perder oportunidades que a veces no se repiten.
- Finalmente, el precio deberá ser el adecuado, ya que si el inmueble está por encima del precio de mercado, no se venderá.
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